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Un homenaje emotivo al recordado padre Juan Pablo
A las 18.00 del martes 1 de abril se descubrió la plaqueta del Instituto de Investigación y Posgrado que ahora lleva el nombre del R.P. Juan Pablo Zabala Tórrez.
A un año de su partida al Reino, se cumplió con este homenaje que sintetiza uno de las tantas tareas que se impuso el padre Juan Pablo. “Un paso adelante más, un signo de que crecemos como universidad”, decía en vida, luego de cumplir la apuesta que había hecho de tener una casa para posgrado y que sea un centro de extensión cultural, como apoyo a la urbe paceña.
La casa ubicada en la avenida Arce fue la elegida entre cuatro opciones, no fue fácil el financiamiento y tampoco recibió una aprobación inmediata de Roma. Con espíritu inquebrantable, el padre Juan Pablo entendió que los signos de los tiempos obligan a un crecimiento gradual y armónico, para responder a las necesidades de una sociedad cada vez más compleja y que exige una formación de calidad de sus profesionales.
El canciller, padre Luis Tórrez Sanjinés, recordó no solo este episodio, sino otros que marcaron la vida del que fue Rector de la USB e Inspector de la Congregación Salesiana. “Se nos fue el mejor de todos, pero quedan sus obras”, señaló en el discurso central. En la oportunidad también se presentaron unas muestras fotográficas que mostraron otra de las aficiones y cualidades del padre Zabala, aficionado a las fotografías de contenido social.
Las vicerrectoras Patricia Gonzales Jemio y Susan Vargas Salazar recordaron episodios felices acompañando al Rector en sus proyectos de consolidación de la Universidad, mientras el vicerrector Ernesto Murillo Estrada presentó al padre Juan pablo desde la perspectiva del joven sonriente y feliz que abrazó la vida sacerdotal como signo de un servicio incondicional en favor de los jóvenes.
En horas de la mañana se celebró la Misa recordando el año de partida del ex Rector, acto litúrgico concelebrado los sacerdotes de las comunidades de Don Bosco El Prado y Don Bosco El Alto, precedido por un audio video que emocionó a los presentes.
A las 18.00 del martes 1 de abril se descubrió la plaqueta del Instituto de Investigación y Posgrado que ahora lleva el nombre del R.P. Juan Pablo Zabala Tórrez. A un año de su partida al Reino, se cumplió con este homenaje que sintetiza uno de las tantas tareas que se impuso el padre Juan Pablo. “Un paso adelante más, un signo de que crecemos como universidad”, decía en vida, luego de cumplir la apuesta que había hecho de tener una casa para posgrado y que sea un centro de extensión cultural, como apoyo a la urbe paceña. La casa ubicada en la avenida Arce fue la elegida entre cuatro opciones, no fue fácil el financiamiento y tampoco recibió una aprobación inmediata de Roma. Con espíritu inquebrantable, el padre Juan Pablo entendió que los signos de los tiempos obligan a un crecimiento gradual y armónico, para responder a las necesidades de una sociedad cada vez más compleja y que exige una formación de calidad de sus profesionales. El canciller, padre Luis Tórrez Sanjinés, recordó no solo este episodio, sino otros que marcaron la vida del que fue Rector de la USB e Inspector de la Congregación Salesiana. “Se nos fue el mejor de todos, pero quedan sus obras”, señaló en el discurso central. En la oportunidad también se presentaron unas muestras fotográficas que mostraron otra de las aficiones y cualidades del padre Zabala, aficionado a las fotografías de contenido social. Las vicerrectoras Patricia Gonzales Jemio y Susan Vargas Salazar recordaron episodios felices acompañando al Rector en sus proyectos de consolidación de la Universidad, mientras el vicerrector Ernesto Murillo Estrada presentó al padre Juan pablo desde la perspectiva del joven sonriente y feliz que abrazó la vida sacerdotal como signo de un servicio incondicional en favor de los jóvenes. En horas de la mañana se celebró la Misa recordando el año de partida del ex Rector, acto litúrgico concelebrado los sacerdotes de las comunidades de Don Bosco El Prado y Don Bosco El Alto, precedido por un audio video que emocionó a los presentes.
